7/3/99

Hazlo visible

Acabando un milenio y comenzando otro. Acabando un milenio importantísimo para la lucha de los derechos de las mujeres y de avances para el conjunto de la sociedad.
Un milenio donde han cambiado las ideas y los conceptos, no solo sobre las mujeres, sino también sobre la familia, la sexualidad, las relaciones entre las personas, la idea del trabajo, incluyendo el asalariado y no asalariado ( Cuidado de las personas y tares domésticas), compartiendo espacios con los hombres, accediendo a pesar de los inconvenientes a lugares y trabajos inimaginables hace 50 años. Dando la vuelta a las universidades, pasando en este mismo milenio del acceso imposible, de una en una y disfrazadas de hombres, a la actualidad, en la que las mujeres son mayoría.
Un milenio en el que conquistamos el derecho al voto, al aborto, al divorcio, en el que se hizo famoso aquello de lo privado también es político en relación a la violencia sexista, malos tratos, violaciones..
Un milenio lleno de sabores agridulces para las mujeres, dispuestas a continuar, a no dejarnos amedrentar ni por los comentarios, ni por las presiones psicológicas empeñadas en insistir que nuestro espacio era el privado ( La casa y sus “Labores”).
Apoyándonos unas a otras, hablando y ejerciendo la autoayuda, la autoestima, el crecimiento personal, los cursos para hablar en público... Un milenio en el que los hombres han ido encontrando mujeres a su lado dispuestas a estar junto a ellos, pero no de cualquier manera, no por obligación, ni con sumisión, sino en plano de igualdad, compartiendo tareas, necesidades y sentimientos.
Un milenio que Ha abierto nuevos referentes del ser mujer y el ser hombre en la vida. Nuevos referentes que son fundamentales para seguir caminando hacia esa sociedad igualitaria : Hoy en día, ya no hay una única forma de ser mujer o de ser hombre. Se puede elegir.
Y para poder seguir avanzando en la capacidad de elección de las personas sin sentirse mediatizadas por el sexo, hay que hacer cada vez más visible esas diferentes formas de ser hombres y mujeres. Es necesario que se nos vea a unos y a otras compartiendo los mismos espacios y ejerciendo las mismas tareas .
Hombres que cogen permiso de paternidad para cuidar a sus hijos o a sus padres, que llevan a sus niños a reuniones. Que limpian el portal, que trabajan en el SAD o de enfermeros.... Mujeres en el andamio, de ingenieras, en el Parlamento.. pero también sin ocultar que hacen tareas domésticas y que cuidan de las personas.
HAY QUE HACERLO VISIBLE. Hay que ir a los espacios públicos, sin ocultar lo privado, que muchas veces, por no compartirlo y por la inexistencia de servicios públicos suficientes, lo privado, impide el acceso en igualdad a muchas mujeres, a esos espacios públicos, incluido el trabajo asalariado y fuera de casa.
Basta ya de un pleno municipal o del Parlamento,sin servicio de guardería. Ninguna vergüenza por parar una reunión para ir de compras o para preparar la merienda de la persona a la que nos toca cuidar. Además de repartir y compartir con la persona con la que convivimos, hay que insistir en una nueva visión del mundo y de sus actividades, en el que se incorporen todos esos trabajos que hacemos las personas ,en estos momentos en su gran mayoría las mujeres.
Y no podemos insistir, si no lo hacemos visible y en esta tarea pueden colaborar hombres y mujeres. No lo ocultes, no te avergüences. Este es un trabajo socialmente necesario y que supone muchas horas en la vida de las personas. Hay que conputarlo, repartirlo, compartirlo y externalizarlo poniendo servicios suficientes.
Ya sabes, este 8 de marzo en todos los espacios, hazlo visible, también en la manifestación. Es un consejo de ANDREA Y MANDRAGORA.